Sonia Olondo, María Marín Aguayo, Noelia Alegre.

Para el IX SIMPOSIO DEL CMEH, CENTRO MUNDIAL DE ESTUDIOS HUMANISTAS 2023

El educador/a con sensibilidad humanista © 2023 de Sonia Olondo; María Marín
Aguayo; Noelia Alegre. está licenciado bajo Attribution-NoDerivatives 4.0International. Para ver una copia de esta licencia, visitehttp://creativecommons.org/licenses/by-nd/4.0/

 

 

Presentación de expositoras:

 

María Marín Aguayo: Vive en Madrid, España. Graduada en Educación Infantil y
Educación Primaria. Maestra de Pedagogía Terapéutica. Capacitadora del programa de
educación emocional: «En Sus Zapatos». Miembro Activo de EduHRed ( Educadores
Humanistas en Red).

 

Sonia Olondo: Vive en Mar del Plata, provincia de Buenos Aires, Argentina. Profesora de
Inglés, trabajó experimentando innovaciones con el objetivo de humanizar las prácticas
educativas, así como al sistema y sus manifestaciones violentas. Los temas abordados entre
otros fueron Ludismo, Talleres de Convivencia, Educación Popular, Psicología de la Imágen,
Comunidades educativas no-violentas. Participa de la red internacional , EduHRed desde hace 3 años.

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Noelia Alegre: Docente de Lengua y Literatura desde 2007
en niveles medio, adulto, adulto en situación de cárcel, y superior de la provincia de Buenos
Aires, Argentina. Especialista en educación superior y tecnologías del aprendizaje y la
comunicación. Actualmente es maestranda de la formación de educadores de la Universidad
Pedagógica Nacional de Argentina.
Interés permanente por la adecuación de la educación a los nuevos tiempos presentes y
futuros para un mundo más humano. Miembro del Movimiento Humanista. Integrante del
Centro de Estudios Humanistas de Buenos Aires. Participante desde los comienzos de
EduHRed.

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Ponencia Educador con Sensibilidad Humanista IX Simposio Mundial de Estudios Humanistas

El educador con sensibilidad humanista

1.-CONTEXTO
Esta exposición corresponde a un estudio realizado por un grupo de docentes participantes
en Educadores Humanistas En Red (EDUHRED) a la luz del método estructural dinámico.
Tod@s teníamos la inquietud de definir cómo es realmente un educador con la sensibilidad
humanista, cuál es el perfil, cuál es su rol, cuales son sus valoraciones, como sería su
comportamiento en el ámbito educativo.
Observamos el creciente malestar registrado por algunos educadores en los ámbitos
educativos, así como la creencia general de que se necesita un cambio, que hay algo que está mal, y
que las expectativas sobre la enseñanza y aprendizaje de niñ@s y adultos no se cumplen. Este
problema parece extenderse en diversas culturas que, con algunas excepciones, muestran la
decadencia de paradigmas educativos anteriores; siendo sujetos y expuestos a numerosas
innovaciones que no llegan a profundizar sobre aspectos más vastos como la concepción del ser
humano, el desarrollo espiritual y el sentido de la vida; considerándolos así estos temas por fuera de
nuestra tarea, cuando en realidad, son la condición de partida que aclara nuestra dirección al
proponernos educar.
Avanzando en la descripción del problema, dijimos que los educadores con sensibilidad
humanista, comienzan su formación en espacios académicos que representan a un sistema que
obedece a un paradigma positivista, donde todo debe ser calculable y medible, por tanto, el éxito
está puesto en los resultados y la competencia es la forma de salir adelante.
A su vez, se producen enunciados muy interesantes que se manifiestan en diseños
curriculares analizados y estudiados repetidamente, pero que no se ponen en práctica en las
instituciones. Lo que hace que los futuros docentes experimenten la incoherencia desde el primer
momento de formación y más aún durante el transcurso de su práctica docente.
Pasado el estudio y entrados en la labor, entran a un ámbito educativo formal y terminan
reproduciendo el mismo sistema de acciones: alta burocracia, conflicto intergeneracional,
condicionamiento del currículum, individualismo, entre otras. Son influenciados por la indiferencia
de los otros educadores frente a la posibilidad de cambio; por la competitividad y desconfianza
entre los profesionales de la educación; por la desmotivación de los estudiantes; por el
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individualismo profesional debido a la fragmentación de la experiencia educativa y la explotación
laboral de cargas horarias extenuantes; así también como por el choque de intereses entre las
familias (que sus hijos obtengan buenas calificaciones y reciban sus buenos títulos) y el educador
con sensibilidad humanista (el aprendizaje y el desarrollo humano).
Por todo esto, el educador con sensibilidad humanista queda condicionado, reproduciendo al
igual que el resto de sus compañeros, una educación carente de sentido y que nada tiene que ver con
la evolución y desarrollo del ser humano a pesar de sus ideales.
Sin embargo, los ideales neoliberales no se reproducen como un bloque inconmovible, sino
que dejan intersticios, espacios de propuesta, que, aún incipientes entre la gran masa crítica que se
amolda a la corriente hegemónica, y con la actual desarticulación de los elementos progresivos,
tienen la posibilidad de transformarla, desde la experiencia.
El problema por tanto es por un lado cómo la contradicción gana terreno en aquellos
educadores humanistas que piensan y sienten que deberían actuar de otra manera a la que quedan
limitados, registrando un retroceso personal y en la humanización de la educación en su medio
educativo. Y por otro lado, cómo discernir qué compañeros aun comportándose a veces
contradictoriamente, también tienen esa sensibilidad humanista, de manera de poder identificarlos y
hacer equipo con ellos en la tarea de humanización de la educación.
Para estudiar esta problemática tan compleja consideramos el Método Estructural
Dinámico como el mejor método posible para aclarar sobre esta preocupación que compartíamos.
Para quienes no conocen el Método fue ordenado por Jorge Pompei junto con otros colaboradores, a
partir de las charlas dadas por Silo (Mario Rodriguez Cobos, intelectual argentino), desde 1960
hasta 1975 aproximadamente.( Tato y Casas, 2018). Este método en palabras de su autor parte de
los estudios sobre la experiencia humana y no de ideas abstractas acerca de las cosas (Pompei,
2008, p 23). Explica además que en este método “nos va a interesar específicamente el estudio de
situaciones y conflictos sociales con que nos encontramos en nuestro accionar cotidiano, con la
intención de lograr una visión más clara de los problemas y de las alternativas que su formulación
presenta. (…) El Método sería, entonces, un intento de compensación ordenadora frente a todo
un sistema de experiencias desordenadas” (Idem, p. 41)
Consideramos que los vamos a exponer en este encuentro es un aporte desde lo educativo a
superar las fronteras del pensar porque El Pensar ya no puede ser algo individual, sino colectivo
y colaborativo en pos de sostener un interés común, como lo fue nuestra labor investigativa. A su
vez, salirnos de un pensar meramente descriptivo de las problemáticas actuales, como lo suelen
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hacer las ciencias sociales formales, y pasar a la construcción de un pensar que nos lleve a la
acción y mejora de los ámbitos reales de experiencia en los que nos movemos es un aporte a
traspasar esas fronteras del pensar en tanto nos ayuda a la acción directa de cambio y mejora de
nuestras realidades.
Es entonces que describiendo todos estos aspectos del problema decidimos ubicar al Educador
con Sensibilidad Humanista como objeto de estudio dentro del método, siendo el interés que nos
guía, su acción transformadora en dirección humanizadora.
Luego, nos dispusimos a analizar nuestro objeto de estudio en Estática, es decir, enmarcado en
todas las realidades que lo conforman como objeto de estudio. Para ello, lo ubicamos
espacialmente, o sea, fijando el Ámbito Mayor en el que está incluido, el Ámbito Medio con los
que se relaciona, que están en su mismo nivel y el Ámbito Menor, en el cual describimos y
precisamos los componentes del objeto de estudio mismo para conocerlo mejor.
Establecimos que en el ámbito mayor se hallan las Políticas Educativas internacionales
impregnadas tanto en diseños curriculares como en leyes de numerosos países, que vienen a
intervenir a partir de las deudas externas contraídas por los distintos gobiernos. Conocemos bien las
consideraciones del Banco Mundial, El FMI, la Unesco, la ONU, etc. etc. Quienes explican y
aplican a cualquier país la misma receta de preparar a los seres humanos para el desarrollo
económico, social y político de las economías hegemónicas nacionales e internacionales cuyas
características son: extractivismo natural, adaptación a la explotación laboral imperante,
competitividad entre individuos y naciones.
Es de esta forma que tanto en las diversas instituciones educativas, como en otros ámbitos relativos
a la educación, se manifiestan las características de un sistema neoliberal que ubica en el centro al
dinero, la producción y el éxito, y no al ser humano y su desarrollo integral humanizante.
Considerando que una política educativa está emplazada en un ámbito mayor, que tiene relación con
un paradigma, ésta influye en la creación de leyes o formas de organizar la educación, las que
finalmente generan un tipo de ser humano que construye su realidad, según esa cosmovisión.
Estos procesos tienen por objetivo la formación para la ciudadanía y el trabajo, fines que, a su
vez, se articulan con el desarrollo del país, siempre y preponderantemente económico. Como
consecuencia de todo esto, el educador que asume o aspira a una sensibilidad humanista queda
condicionado a llevar a la práctica un currículo donde el alumnado como ser humano, su
desarrollo integral (interno y externo) y su bienestar queda en último lugar.

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Por otro lado, observamos también cómo todos los niveles educativos se entregan a corporaciones
privadas o personas naturales o jurídicas dando la posibilidad de lucrar con los establecimientos
educacionales por tanto la formación pasa a ser un negocio donde se profundiza la brecha social.

Sostuvimos que el educador se relaciona en su ámbito medio, es decir, en aquellos ámbitos
donde se produce una interacción más o menos horizontal, con otras personas que pudieran tener
diversos objetivos y propósitos en su quehacer laboral. Por ejemplo, con toda la comunidad
escolar, otros profesores, especialistas sociales y psicológicos, el equipo directivo, los
estudiantes, los administrativos, los auxiliares de mantenimiento, y otros profesionales de la
educación.
Los educadores con sensibilidad humanista se relacionan con otras personas, con diferentes
colectivos que tienen diversas miradas en relación a la educación; desde las más extremas, como la
educación en casa y las escuelas libres que intentan diferenciarse del sistema; hasta los colectivos
que buscan la emancipación desde una educación popular; los sindicalizados que ven la raíz del
problema en las condiciones laborales; y aquellos que se adaptan de manera decreciente con una
pérdida de sentido que solo cumplen con las exigencias sin realizar un aporte a la transformación. A
estos educadores podríamos ubicarlos en la problemática pandemica del burnout. También se
encuentran los colectivos que responden 100% al sistema neoliberal capitalista, buscando resultados
por medio de la competencia, el individualismo y la exigencia al éxito. Por último, los que tienen la
sensibilidad en dirección propiciando el desarrollo integral, ubicando al ser humano como valor
central. A estos, los denominamos educadores con sensibilidad humanista. Estos últimos se
relacionan con otras personas educadoras, las cuales nucleamos en estos 4 tipos educadores en
sus aspectos generales:

● Las personas de la comunidad educativa con un rol social emancipador o las que tienen
una intención innovadora, pero sin profundización interna, y que no están
comprometidas en las transformaciones sociales y personales.
● Las personas de la comunidad educativa que se adaptan de manera decreciente, con una
pérdida de sentido por su labor, que hacen todo o nada por cumplir, pero no realizan un
aporte transformador.
● Las personas de la comunidad educativa que priorizan los valores del sistema neoliberal,
buscando resultados por medio de la competencia y del éxito.
● Por último, los que tienen la sensibilidad en dirección humanizadora, propiciando el
desarrollo integral, personal y social simultáneo ubicando al ser humano como valor
central.

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Enfocando más internamente al educador humanista como objeto de estudio, es decir, distinguiendo
sus elementos más constitutivos pero siempre dinámicos, vemos que tiende a:

● Trabaja para mejorar como ser humano y docente ayudando a crecer a otros.
● Desarrolla la fe en sí mismo y los demás, afirmándose en el dar.
● Suele capacitarse en el ejercicio del pensar coherente, el desenvolvimiento emotivo y la
práctica de todos los recursos corporales.
● Suele ayudar o busca ayudar a los alumnos a desarrollar su intencionalidad, es decir, ubicar
una mirada en la que sean conscientes de que las acciones humanas y por tanto las suyas
propias, son las que transforman su medio inmediato y por lo tanto el mundo.
● Manifiesta una actitud abierta al mundo para comunicar, cotejar y revisar
conocimiento, teorías, herramientas y sus visiones, encontrando posibilidades para
transformar su medio y a sí mismo.

Por todo lo expuesto en cuanto a la configuración del educador con sensibilidad humanista y su
proceso histórico de construcción, nuestro objeto de estudio/interés se relaciona
dinámicamente de manera creciente con personas de la comunidad educativa y colectivos que
están en una búsqueda transformadora y, por el contrario, encuentra resistencias firmes, con las
personas o colectivos más conservadores, burocráticos y aquellos que priorizan los valores del
sistema neoliberal (éxito, competencia, dinero, prestigio, etc.)

Una vez establecido los distintos ámbitos en los que se enmarca, con los que se relaciona y lo que lo
compone. Seguimos estudiándolo en su proceso histórico y contemporáneo.

Considerando el estudio analítico realizado y teniendo en cuenta el ámbito mayor (políticas
educativas), el ámbito medio (el educador con sensibilidad humanista y sus relaciones) y el
ámbito menor, que son todas las características intuitivas del educador con sensibilidad humanista,
podemos deducir que a pesar de todos los condicionamientos que tienen estos docentes, existe una
intencionalidad que se puede observar a largo del tiempo especialmente desde finales del s. XVIII
donde aparecen con fuerza nuevas pedagogías en dirección humanizadora.

Dado que nuestro objeto de estudio e interés es el educador con sensibilidad humanista y su acción
transformadora, entendemos que esta construcción de educador responde a la evolución en distintos
momentos históricos con particularidades epocales.

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Al mirar al pasado no podemos conocer la forma de ser de estos educadores y pedagogos si no nos
guiamos por las ideas de sus aportes pedagógicos y de sus acciones construyendo nuevos modelos
pedagógicos y nuevas escuelas innovadoras. Para valorar el proceso histórico del que venimos,
hemos considerado el periodo de tiempo comprendido desde el siglo XVIII hasta el momento
actual.

A finales del siglo XVIII y principios del S. XIX se encuentran algunos pedagogos y filósofos
como Comenius, Pestalozzi, Rouseau y Fröebel. Con ellos aparecieron las primeras teorizaciones
sobre la educación pensada para el ciudadano y no ya para súbdito. Al llegar al final del siglo XIX y
principios del XX se le da a la educación un sentido más social y homogeneizador preparando a las
nuevas generaciones para el trabajo y el sentido democrático. Estos referentes y sus propuestas
traccionaron un nuevo paradigma educativo, donde prevalecía la importancia de que la educación
sea de todos y para todos. Muchos de ellos, propiciaron la necesidad de respetar la naturaleza del
niño, la importancia de la cooperación y ayuda mutua. Los consideramos los precursores del
movimiento de la Escuela Nueva.
Gracias a este primer momento històrico de lo que denominamos hoy el educador con sensibilidad
humanista, analizamos las corrientes innovadoras del siglo XX y desde allí aquellas que
subsistieron, por tener vigencia hasta nuestros días, así como otras que expresan el nuevo paradigma
en el cual nos basamos y otros paradigmas contemporáneos

A finales del siglo XIX y principio del XX surge lo que luego se llamaría la “escuela Nueva” de
donde destacamos a Montessori, Freinet, Regio Emilia, Decroly, Dewey y Montesinos. Sus
postulaciones sobre el niño/niña como centro de la educación y su autonomía, son innovaciones a la
luz de la educación enciclopédica de los siglos anteriores.
Estos aportes dan paso a nuevas corrientes pedagógicas y psicológicas en el siglo XX, como la
Pedagogía del Oprimido (Freire), la cual postula la emancipación de las clases populares a nivel
social y comunitario a través de educadores epistemológicamente curiosos Freire, Cartas a quien
pretende enseñar,p. 9oc. 197), la Educación y el Sentido de la Vida (Krishnamurti), Pedagogía
Waldorf (Steiner) que establece un énfasis al mundo espiritual donde cada hombre debería ser capaz
de alcanzar una experiencia mística que lo conecte con lo divino de sí mismo
(Religion.idoneos.com, 19 de marzo de 2023), Movimiento Libre (Emmy Pikler) desde la mirada
pediátrica y la puericultura; la Educación Humanista Universalista (Silo), donde su educación
integral con intención humanizadora del mundo guía su proceso holístico de aprendizaje; y por
último la Psicología Cognitiva (Piaget y Vygotsky, Gardner) que hablan sobre la capacidad de

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construcción cognitiva del niño tanto en su esfera individual (Piaget), como en lo histórica
(Vygotsky), y la existencia de inteligencias múltiples (Gadner).

Por otro lado, en este proceso histórico, el educador con sensibilidad humanista, actualmente
cuenta con apoyos externos como las movilizaciones sociales que buscan el bienestar de tod@s,
las personas que trabajan por el desarrollo integral y /o con un rol emancipador, y los ambientes
educativos que propician una mirada humanizadora a partir de las crisis multifacéticas que agobian
a las distintas sociedades.

Todo esto se traduce en nuevas búsquedas pedagógicas en la actualidad (siglo XXI) como La
Pedagogía de la Intencionalidad (Silo), Pedagogía de la Compasión (Dalai Lama), Escuelas libres,
COPEHU (Corriente pedagógica humanista universalista), Educadores Humanistas en
Red.(EduHred)

Llegamos así, finalmente, a las características más acabadas y menos intuitivas de lo que
denominamos el Educador/a con sensibilidad humanista.

CARACTERÍSTICAS DEL EDUCADOR CON SENSIBILIDAD HUMANISTA

Siguiendo el proceso del MÉTODO ESTRUCTURAL DINÁMICO, pasamos por el ÁMBITO
MAYOR, el AMBITO MEDIO O RELACIONAL y llegamos al ámbito de la COMPOSITIVA del
objeto de estudio, es decir si nuestro objeto de estudio es el educador con sensibilidad humanista,
fijamos el ÁMBITO MENOR precisando cuales son las características de este educador a las que
arribamos después de nuestro estudio Esto fue lo que intentamos describir en profundidad,
buscando una imagen de educador/ a

Nos detenemos en el término imagen, ya que siguiendo la premisa que las imágenes más que las
palabras atraen acciones, si llegáramos a formar en nuestro espacio de representación, es decir,
construir una imagen potente y acabada no sólo del educador que aspiramos, en abstracto sino de
nosotros mismos expresando esas características en nuestra propia mente, esto facilitaría el
acercamiento a ella. ¿Cómo nos moveríamos entonces? ¿Cuál sería nuestra postura corporal, la
expresión de nuestro rostro, ? ¿Cómo canalizaríamos las propuestas de los alumnos? ¿Cómo
mediaríamos con calma ante los conflictos?

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Se suele hablar en términos de rol docente para describir el perfil del egresado de los Institutos de
Formación Docente, enumerando acciones y actitudes que se esperan de él o ella, refiriéndose a
elles como fuerza de trabajo.
Según nuestra visión, las características más importantes de un educador no se encontrarían sólo en
un rol, simplemente en una herramienta adecuada para funcionar en un ámbito, sino más “atrás”, en
sus actitudes, en sus creencias profundas.
Al describir únicamente su rol, se tiende a objetivizarlo/a negando en parte su particularidad. Sin
embargo, al considerarlo en su integridad, lo humanizamos. Coincidentemente, vemos ,que este
educador se encuentra atravesando cierta situación vital, con una historia previa, y determinadas
aspiraciones a futuro.
Así cómo se indaga sobre la experiencia previa de los alumnos, ¿se considera al docente como que
viene ya hecho sin saber de donde partimos para aclararnos hacia dónde dirigirnos?

Distinguimos en la situación vital del docente
Su entorno familiar, personas con las que convive o frecuenta cotidianamente.
Su Vivienda, medios de transporte que utiliza.
Su actividad laboral, académica y recreativa.
Sus Dificultades.

Reconocemos su historia previa
Experiencias previas en cuanto a sus actividades, fracasos y aciertos.
Su capacitación profesional.
Sus búsquedas artísticas o internas, religiosas o trascendentes
Sus relaciones laborales, actividades de militancia social o política

Así mismo, tiene sus Proyectos a futuro en todos los ámbitos mencionados.
Económicos
Laborales/Intelectuales
Relacionales
Recreativos
Carencia de Proyectos.

En las aspiraciones futuras aparecen las características del educador/a humanista.
Nos detenemos nuevamente en la palabra aspiración, para evidenciar que estas características
“aspiran”, son directrices, características a estudiar, consensuar, ponerse como propósito, visualizar
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e ir hacia ahí. Marcan una dirección, a partir de ellas sabemos hacia dónde ir. La sensibilidad
humanista se adquiere, se construye, es un proceso. También es un propósito colectivo, es decir, es
responsabilidad de todo el conjunto apoyar a cada une a concretar sus aspiraciones.
Por eso, es que sostenemos enfáticamente que su labor es más que un rol objetivable como expresa
el sistema educativo en sus múltiples documentos oficiales. Su labor es una manera se ser y estar en
su mundo laboral arraigada y construida desde las profundidades de su experiencia.

En las características del educador con sensibilidad humanista distinguimos:
1. Con respecto a sí mismo:
Este educador reconoce sus propias creencias y reflexiona sobre ellas para mejorar sus
respuestas al medio.
Manifiesta una búsqueda por mejorar como persona y aportar a la institución en que trabaja,
adaptándose de manera creciente, creando condiciones para generar ámbitos con otros.
Trabaja en su coherencia personal, pensando, sintiendo y actuando en dirección
humanizadora, en su coherencia interpersonal, tratando a los otros cómo les gustaría ser
tratado y en su coherencia social, propiciando la transformación personal y social,
influyendo en el medio educativo, llegando a toda la comunidad, considerando a las
familias.

Reflexiona sobre la validez de sus acciones así como sus relaciones en estos ámbitos
cercanos.(ver La Acción Válida. Silo -Canarias. 19 )Silo La Acción Válida LINK

Despliega el ̈dar ̈ como modo de trascender el sufrimiento y el capacitarse con otros para
lograr un tránsito fluido por diferentes momentos de su proceso.

Trabaja la reconciliación con las situaciones de violencia del pasado. (Ver conferencia sobre
La reconciliación y Talleres)

2. Con respecto a sus estudiantes:

Profundiza la cultura y el conocimiento previo de cada estudiante para enriquecer la
enseñanza,
Ofrece estrategias para el aprendizaje activo, valorando el autoaprendizaje,
reconociendo la intencionalidad de cada persona.

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Utiliza las cinco llaves del aprendizaje para crear las atmósferas necesarias desde el
afecto, el buen humor, la atención, el ambiente y el diálogo generacional.( Ver
Pedagogia de la Intencionalidad Aguilar-Bize. Chile 2017)Las 5 llaves del Aprendizaje- Aguilar-Bize LINK

Confía en el proceso poniendo fe en el alumnado, ubicando en el centro la felicidad
y el desarrollo, más que la concentración de conocimientos curriculares.

Promueve el diálogo y la comunicación, propicia el trabajo en grupo y colaborativo.
Utiliza el arte orientado al desarrollo de la sensibilidad social.

Considera el desarrollo integral desde el equilibrio de los centros de respuesta
(vegetativo, motriz, emotivo e intelectual).

3. En su medio laboral:

Prioriza la acción educativa a la burocrática, las reales necesidades de los alumnos antes
que las del currículum.

Define su acción desde la no violencia. Actúa como mediador en los conflictos e
intenciona la prevención de los mismos utilizando técnicas de reconocimiento y comprensión.
(VerLibro de la Regla de Oro)Mirian Barberena Reescritura de la tesis de doctorado MiñoyD 3-02-21 LINK

Promueve los encuentros de reflexión conjunta y proyectos colaborativos.

Por último, sabemos que el proceso de cambio que describimos lleva su tiempo así como momentos
de duda, de avances y retrocesos y estancamiento y sólo el trabajo con otros nos alienta, nos facilita
y nos salva cuando las situaciones complejas nos tientan a no innovar. a hacer siempre lo mismo.El
trabajo conjunto, es el mayor desafío en tiempos como estos de fragmentación y disolución de los
lazos humanos. El trabajo conjunto trasciende las compulsiones facilistas de repetir, mecanizar sin
ver a los otros siempre únicos y al mundo siempre cambiante.

– CONCLUSIÓN: Habiendo aclarado nuestra visión sobre la realidad en la que estamos inmersos
los educadores y las características de la sensibilidad humanista propiamente dicha, consideramos la
importancia para el educador con tal sensibilidad de poder realizar una transformación social en
dirección humanizadora, de apoyarse por un lado en personas de la comunidad educativa que
priorizan el desarrollo integral de sus miembros, aquellas que actúan por un cambio de innovación
pedagógica o un cambio social y aquellos ámbitos que no siendo específicamente educativos,
propician como estilo de vida una mirada humanizadora. Además el educador con sensibilidad
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humanista (el objeto de estudio) tiene unas características basadas en la fe, la compasión y el afecto
verdadero hacia el ser humano, que lo impulsa en búsqueda de su coherencia personal a lanzar actos
de transformación creciente en el ámbito educativo.
Por último, consideramos también que el educador con sensibilidad humanista podrá apoyarse en
sus propias características, cualidades(sensibilidad, afabilidad, esperanza…), fortalecidas estas por
el esclarecimiento del trabajo con las Virtudes. (Ver Taller de las Virtudes)

Tras este estudio nos surgen más inquietudes y preguntas que darían pie a trabajar varios temas en
conjunto a la luz del método estructural dinámico como por ejemplo profundizar en los aportes a
una educación humanizadora realizados por algunos autores de innovación pedagógica, estudio
sobre los roles del educador humanista entre otros.

Nos resta poner en marcha un proceso para concretar en la práctica, esas líneas trazadoras
generales. Se propone que, mediante talleres, se intercambie sobre qué significa en el trabajo
cotidiano acercarnos a las directrices lanzadas, qué respuestas damos antes los conflictos, qué
dificultades tenemos y cómo podemos sortearlas colectivamente. Estas actividades podrían
conformarse como instancias de capacitación o intercambio docente para soluciones concretas.

BIBLIOGRAFÍA
Aguilar, M. y Bize B., R., 2011, Pedagogía de la intencionalidad: educando para una conciencia
activa, Editorial Homo sapiens,Argentina.
de Casas, T. y Tato, N. (2018), El pensamiento de Silo sobre el pensar y el método, CMEH,
Ediciones Moebius, Bs. As. Argentina.
Novotny, A., Goyena, K., Di Tomaso, S. (2016)Preparando los caminos para los nuevos tiempos.
Una mirada humanista sobre el aprendizaje, Hypatia, Buenos Aires Argentina.
Pompei, J. (2008), Teoría y Práctica Método Estructural Dinámico: seminario, taller. CMEH,
Altuna Impresores, Argentina.
Religion.idoneos.com en:
https://religion.idoneos.com/religiones/nuevos_movimientos_religiosos/antroposofia/)
Silo, 2013, Carta a mis amigos: primera carta a mis amigos sobre la crisis social y personal en el
momento actual. Editorial León Alado. Argentina.
Silo,2013,Humanizar la Tierra, Editorial León Alado, España.
Terigi F. ()El Aprendizaje en la Teoría Sociohistórica. En Psicología Educacional. Universidad
virtual de Quilmes.
—— () El Aprendizaje en la teoría Psicogenética. En Psicología Educacional. Universidad virtual
de Quilmes.

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Ponencia. Parte 3. Características del educador con sensibilidad humanista.

El educ sens human sint [Autoguardado] LINK